La inacción política ante el cambio climático es un gran impedimento si se quiere frenar el calentamiento global. Los gobiernos no están haciendo los deberes descritos en el Acuerdo de París ni con las emisiones de CO2 ni con la justicia energética. Así lo pone de relieve el informe anual de la Agencia Internacional de la Energía (World Energy Outlook, WEO) que recoge ‘Energías Renovables’. Ante la pasividad o la lentitud de las decisiones gubernamentales, la organización mundial marca una hoja de ruta para que la humanidad cumpla con los compromisos climáticos que ya ha adquirido de aquí a 2040.
El Panorama Energético Global 2019 de la AIE describe tres escenarios posibles en los próximos 20 años en función de las políticas que se adopten. El primero sería que ocurriría con las políticas vigentes. La agencia prevé tensiones de todo tipo en los mercados, con fuertes crecimientos de las emisiones procedentes del sector energético lo que conduciría a más calentamiento global. El segundo escenario sería el de cumplir con las políticas que han prometido los gobiernos. A pesar de conseguirlo, no bastaría. Esta situación supondría que cientos de millones de personas seguirían sin acceso a la electricidad, muertes prematuras por la polución y grandes efectos por el impacto del clima. Sólo si los gobiernos más más allá, se podría lograr un escenario de desarrollo sostenible.escenario, requiere de cambios rápidos en todo el sistema energético. Necesitamos eficiencia y servicios energéticos a un coste competitivo.
“Son muchas las soluciones que deben ser implementadas para resolver el que toda la ciencia ya considera el mayor reto al que se enfrenta la humanidad: el cambio climático. Fatih Birol, director ejecutivo de la Agencia Internacional de la Energía: «lo que deja cristalinamente claro este Panorama Global de la Energía es que no hay una solución singular para transformar el sistema energético global. Muchas tecnologías y muchos combustibles habrán de desempeñar su rol en todos los sectores de la economía. Para que ello suceda, necesitamos liderazgos fuertes por parte de los decisores políticos, porque son los gobiernos los que tienen la más evidente responsabilidad para actuar y los que están llamados en mayor medida a darle forma al futuro».
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