La contaminación atmosférica acabó con la vida de 38.600 personas en España, más de medio millón en Europa, 518.700. La gran parte de las muertes se concentraron en los 28 países miembros de la Unión Europea, 483.400 personas que perdieron su vida de forma prematura durante 2015. Así lo indica el nuevo informe de la Agencia Europea del Medio Ambiente (AEMEA) quien sostiene que a pesar de una mejora del aire aún los indicadores se mantienen por encima de los límites autorizados por la UE y de los recomendados por la Organización Mundial de Salud (OMS) que son aún más estrictos. “La contaminación atmosférica representa un peligro para la salud humana y el medio ambiente”, destacan en el informe. Como ejemplo, la exposición a dióxido de nitrógeno y ozono troposférico causó la muerte a cerca de 100.000 personas en Europa.

La contaminación atmosférica provoca también grandes perdidas económicas. “Acorta la vida, aumenta los costes médicos, reduce la productividad, causa enfermedades”, detalla la agencia, quien apunta al efecto negativo a los ecosistemas. “Produce daños en suelos, bosques, lagos y ríos, y reduce el rendimiento agrícola”, añaden. Hans Bruyninckx, director ejecutivo de la AEMA, advierte de que “la contaminación atmosférica es un asesino invisible”, y resalta que “tenemos que intensificar nuestros esfuerzos para abordar las causas”. “Es muy importante que Europa redoble sus esfuerzos para reducir las emisiones causadas por el transporte

–las emisiones del transporte por carretera suelen ser más perjudiciales que las de otras fuentes– la energía y la agricultura, y que invierta en hacerlas más limpias y sostenibles”, aseveró el director del organismo europeo. Para Bruyninckx, abordar estos sectores de un modo integrado puede ofrecer claros beneficios tanto para la calidad del aire como para el clima, y contribuirá a mejorar nuestra salud y nuestro bienestar”.

 

 

Las muertes por contaminación del aire rozan el medio millón en Europa