El reto de la Unión Europea será lograr la neutralidad climática en 2050. Para ello, la recién elegida presidenta Ursula von der Leyen priorizará en su agenda política el cambio climático. La primera acción ha sido fijar una hoja de ruta denominada “Green and Fair New Deal” (Un nuevo acuerdo verde y justo) en el que figuran una batería de medidas. Posiblemente, una de las actuaciones que propone y que levantará más ampollas entre los consumidores será la subida de los precios de los billetes de avión.

La presidenta de la UE plantea, según recoge Kataca.com y el diario berlinés Tagesspiel, una subida de tarifas por emisiones a las aerolíneas. Ahora todas las compañías que quieran operar en suelo europeo deben comprar derechos de emisión. Funcionan como un incentivo negativo a la contaminación. Los certificados le han costado a las compañías más de 600 millones de euros en 2019. La Comisión Europea quiera duplicar la cuantía. Un coste que repercutirá en los usuarios con el objetivo de frenar el número de viajes.

Otra de las grandes medidas será la electrificación del transporte. La máxima responsable de la Comisión Europea quiere que para 2025 haya un millón de vehículos eléctricos. Además, pretende fortalecer la energía eólica marina con un mapa de actuación y facilitar su acumulación; propiciar la generación de energía en los edificios y ayudar a la industria del acero para que sea menos contaminante y aumentar las ayudas para las regiones en las que terminarán las actividades mineras de carbón.