La Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático COP26 arranca hoy con el objetivo de lograr que el mundo reaccione y los gobiernos aceleren medidas para combatir las consecuencias del cambio climático. El encuentro deber servir para fijar acciones de reducción de emisiones, de adaptación al cambio climático, financiación a los países más vulnerables y afianzamiento del libro de normas del Acuerdo de París. El Scottish Event Campus (SEC) de Glasgow (Reino Unido) acogerá el encuentro hasta el próximo 12 noviembre. La cita global reúne a los mandatarios de 197 países y parece que este año, todos los gobiernos apuestan por ser más ambiciosos en las medidas que adopten. Este año es decisivo y la reunión ha generado muchas expectativas por parte de líderes mundiales, activistas y ecologistas.
Es necesario que todos remen en la misma dirección para establecer recortes más drásticos en las emisiones. La Organización de Naciones Unidas (ONU), ya ha advertido de que si se mantiene la situación actual, la temperatura global puede llegar a subir 2,7º C, en vez de solo 1’5º C, como se acordó limitar en París. Todos los territorios deberán presentar sus estrategias nacionales de reducción de emisiones, para garantizar este objetivo de París, que hoy parece lejano. Sobre todo, porque según el Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático (IPCC) de la ONU asevera que ya el cambio climático ha causado cambios que serán irreversibles. Este organismo advierte de que el incremento de la temperatura seguirá al menos hasta mediados de este siglo independientemente de las medidas que se adopten.
La eólica exige más ambición para acelerar el despliegue de las renovables
